Guárico. SAN JUAN DE LOS MORROS. Un acto de fe y devoción del pueblo católico se vivió la tarde-noche de este Miércoles Santo en San Juan de los Morros, con la realización de la eucaristía y procesión del Nazareno.

Cientos de devotos se concentraron en las afueras de la catedral San Juan Bautista para oír la eucaristía, presidida por el Obispo de Calabozo, Manuel Felipe Díaz Sánchez.

La emoción, agradecimiento, humildad y regocijo de los creyentes se observó en cada oración y en cada canto, fortaleciendo el espíritu con la fe, dando gracias al Nazareno por tantos favores y milagros concedidos, a la vez, pidiendo también por la salud, la familia, el país y el mundo entero.

“Hoy debemos recordar que la cruz que llevamos debe ser como la de Cristo, una cruz salvadora, para nosotros mismos y para los demás, el Señor ha hecho sobre sí el mayor peso y nos da la fuerza para llegar al final”, aseveró el Obispo durante su intervención.

El Miércoles Santo marca el final de la cuaresma y el inicio de la pascua. Es una fecha crucial en el que, según la Biblia, se decide la sentencia de Jesús en la cruz.

Este día es recordado en las sagradas escrituras como el día que representó la más grande traición, la de Judas Iscariote, quien, según San Mateo, se reunió con el Sanedrín (tribunal religioso judío) para condenar a Jesús a la crucifixión, vendiéndolo por 30 monedas de plata.

“Esa tarde se sienta el Señor con sus discípulos en la mesa para comer la cena pascual, en el transcurso de la comida Jesús dice claramente que uno de ellos es un traidor, la traición, por definición, es obra de alguien cercano, un pariente o un amigo, Jesús había llamado amigos a sus discípulos, les había dado poder de hacer milagros y la orden de predicar y bautizar”, agregó el Obispo de Calabozo.

Luego de la eucaristía, los feligreses procedieron a salir en procesión acompañando a la imagen de Jesús de Nazareth en la cruz y la Dolorosa, por la avenida Bolívar y Sendrea para luego regresar al Templo. “Jesús va con su cruz a cuestas, camino al calvario, para cumplir y sellar su misión salvadora, ¡qué grande es la fe de nuestro pueblo! una vez más felicitamos a San Juan de los Morros, por su piedad, por esa serenidad espiritual, por ese recogimiento en la celebración de la eucaristía a cielo abierto”, dijo Monseñor Raúl Ascanio, párroco de la iglesia San Juan Bautista y vicario general de la Arquidiócesis de Calabozo, quien también agradeció la colaboración de instituciones públicas regionales y municipales que participaron en la logística de la actividad, suministrando hidratación y velas. De igual manera, a los cuerpos de seguridad, gestión de riesgo, Frente Preventivo y estudiantes de la Unes, quienes se encargaron de garantizar el orden y resguardo de los devotos, así como la asistencia médica oportuna.